Islandia es un país isleño cerca
del Círculo Polar Ártico, al norte del Océano Atlántico. Es un lugar único
porque su territorio está atravesado por la Dorsal Mesoatlántica, que separa
las placas tectónicas americana y europea. Así que, aunque es un país europeo,
tiene una parte en América y otra en Europa.
La dorsal no es solo una línea
divisoria entre dos placas de la corteza, sino un conjunto de grietas que, con
el paso de millones de años, se han ido formando y desapareciendo debido al
pequeño pero constante movimiento de separación de las placas.
En Islandia junto a la cueva Grjótagjá. Foto:
Mónica Alonso
La dorsal en el Parque Nacional de
Thingvellir. Fuente: volcanismandgeology.wordpress.com
El buceo en Silfra
Aunque suene extremo, en Islandia también se puede bucear, y no en el
mar, sino en una de las grietas de la dorsal, en un lugar llamado Silfra.
Bucear en las grietas sumergidas de la corteza terrestre parece sacado de una
novela de Julio Verne, pero es algo al alcance de cualquiera que quiera
disfrutar de una experiencia de buceo diferente.
La grieta de Silfra, ubicada en
el Parque Nacional de Thingvellir, se formó en 1789 tras varios terremotos que
causaron grandes movimientos entre las placas. Desde entonces, se llena
constantemente con aguas provenientes del glaciar Langjökull.
Las grietas en la zona aumentan de ancho unos dos centímetros cada año,
y la tensión que se acumula por este movimiento se libera periódicamente con
terremotos cada diez años, más o menos. Su anchura no es uniforme, lo que da
lugar a la formación de cuevas y grandes huecos que al llenarse de agua forman
lagos. De hecho, Silfra se encuentra en una de las grietas más grandes de la
zona, que comenzó en una cueva subterránea junto al lago Thingvallavatn.
En ese lugar puedes disfrutar de aguas cristalinas, con una temperatura
entre dos y cinco grados, por lo que se usa traje seco. Además, la visibilidad
llega hasta los 100 metros. ¡Una maravilla!
Aunque cuando estuve allí no
buceé, he visto muchas referencias de personas que sí lo han hecho y he podido
ver algunas fotos. Lo curioso de la mayoría de ellas es que muestran a los
buceadores en una zona estrecha de la grieta, tocando con una mano América y
con la otra Europa. Parece que la sensación de tocar dos continentes a la vez,
uno con cada mano, es única en el mundo.
Bucear en Silfra permite al buceador
poder tocar la placa euroasiática con una mano, y la americana con la otra.
Fuente: Manawa.com
Las agencias que organizan esta
actividad explican que el recorrido por la gran grieta comienza en Silfra Hall,
donde se pueden ver patos y gansos nadando por encima. Luego, se ingresa a la
catedral de Silfra, el punto más profundo y ancho, y finalmente se bucea en el
lago.
Para participar, se requiere un
nivel de “open water” y una certificación de traje seco, o haber realizado 10
buceos con traje seco certificados. Aunque no se alcanzan grandes profundidades
(máximo 14 metros), se recomienda tener una certificación “advanced”. Además,
en este lugar se puede obtener la titulación de especialidad PADI en buceo
entre placas tectónicas, un curso que no se ofrece en ningún otro lugar del
mundo.
También se realizan actividades
de snorkel para los turistas que no bucean.
La Dorsal Mesoatlática emerge
en Islandia
Dejando a un lado lo singular de
la actividad de buceo, al viajero que va a Islandia le llama mucho la atención
el encontrarse en el borde de dos placas en mitad de la isla. Esto es inusual,
porque los confines de las placas suelen encontrarse en los fondos marinos y no
en la superficie terrestre emergida.
Las dorsales oceánicas son como
grietas submarinas. Son “rifts”, zonas donde las placas tectónicas se separan y
la corteza terrestre se forma gracias a la salida de magma de capas inferiores.
Por eso, son lugares donde se concentran volcanes y terremotos.
El rift es la zona central de una dorsal oceánica, donde se lleva a cabo la separación de las placas tectónicas y el surgimiento de nueva corteza oceánica. Este proceso, conocido como expansión del fondo marino, es fundamental para la renovación continua de la superficie terrestre. A medida que el magma asciende desde el manto terrestre, se enfría y solidifica, creando nueva corteza en el centro de las dorsales oceánicas. Este fenómeno ocurre a lo largo de miles de kilómetros en los océanos del mundo, y es una de las principales fuerzas impulsoras de la tectónica de placas. La expansión del fondo marino no solo forma nueva corteza, sino que también empuja las placas tectónicas en direcciones opuestas, lo que puede llevar a la formación de montañas, terremotos y otras características geológicas. Fuente: Wikipedia
Esquema de una dorsal oceánica.
Fuente: UCLM. Dibujo: E. González Cárdenas
La Dorsal Mesoatlántica divide en
dos el fondo del Océano Atlántico, separando en el Atlántico Norte las placas
euroasiática y norteamericana, y en el Atlántico Sur, las placas africana y
sudamericana.
Con una longitud de 40.000 km, esta dorsal suele estar sumergida entre 3.000 y 5.000 metros de profundidad. Tiene una cordillera formada por el material que sale de ella, que se eleva entre 1.000 y 3.000 metros desde el lecho marino. Sin embargo, en Islandia, siendo una isla creada por los volcanes de la dorsal, esta emerge y puede verse en mitad de la superficie de la isla.
Las dorsales oceánicas se extienden a
lo largo de miles de kilómetros por los océanos del mundo, como la Dorsal
Mesoatlántica en el Océano Atlántico. Estas formaciones son fundamentales para
entender la dinámica de nuestro planeta y cómo se renueva continuamente la
superficie terrestre. Este proceso de creación de corteza y el flujo constante
de magma resultan en características geológicas fascinantes y en la formación
de paisajes submarinos únicos. Fuente: Insugeo.org
En toda la isla de Islandia se
pueden encontrar grietas de la dorsal, no solo en Silfra. En ellas y sus
alrededores, se pueden descubrir lugares mágicos con volcanes, fumarolas,
géiseres y fuentes geotermales sacudidos por abundantes terremotos.
La cueva
Grjótagjá, cerca del Lago Myvatn en el norte de Islandia, fue utilizada durante
muchas décadas como piscina natural gracias a sus aguas termales. Sin embargo,
actualmente el baño está prohibido debido a que la temperatura del agua ha
aumentado a unos 60ºC. Esta cueva fue escenario de la famosa serie "Juego
de Tronos" en 2013. Foto: Javier Larrinaga
Las
dorsales oceánicas como fuente de vida en los fondos abisales
Mientras exploraba Islandia y
visitaba lugares relacionados con las grietas emergidas de la dorsal, me acordé
de “Planeta Azul”, donde en uno de sus asombrosos documentales se mostraban las
chimeneas hidrotermales y los ecosistemas únicos que se desarrollan alrededor
de ellas, que son verdaderamente sorprendentes.
En 1977, durante una expedición
en el fondo del Pacífico, se descubrieron las primeras chimeneas hidrotermales
en una dorsal. Estas formaciones permiten que el agua del océano, infiltrada a
través de las grietas de la corteza submarina, se caliente y regrese a la
superficie, generando columnas de vapor, también conocidas como fumarolas. Por ellas
salen aguas termales de alta temperatura y acidez, que transportan minerales
como sulfuros, que se depositan en la zona.
Las chimeneas hidrotermales son
verdaderos oasis de vida en el fondo del océano, donde organismos extremófilos
(que viven en condiciones extremas), como las bacterias quimiosintéticas, se
han adaptado a vivir allí, utilizando los compuestos químicos presentes para su
supervivencia. Estas comunidades biológicas son un ejemplo sorprendente de cómo
la vida puede prosperar en los lugares más inhóspitos de nuestro planeta.
Fumarolas hidrotermales. Fuente:
Ingeoexpert.com
Las fumarolas o fuentes hidrotermales
pueden alcanzar temperaturas extremas de hasta 400 grados centígrados. Sin
embargo, algunas criaturas como los gusanos tubícolas gigantes han desarrollado
adaptaciones asombrosas para vivir en estos entornos extremos. Gracias a la
simbiosis con bacterias quimiosintéticas, estos organismos pueden prosperar
donde otras formas de vida no podrían sobrevivir. Fuente: BBC.com. Autor: NOAA
En los ecosistemas más conocidos
por el ser humano, los organismos fotosintéticos base de la cadena alimentaria,
usan la energía de la luz para sintetizar su alimento a partir de nutrientes
como el nitrógeno y el fósforo. Sin embargo, en el caso de las bacterias que
viven cerca de las chimeneas hidrotermales, donde no hay luz solar, utilizan la
quimiosíntesis para producir energía en lugar de la fotosíntesis.
La quimiosíntesis es un proceso
en el cual las bacterias obtienen energía al oxidar compuestos químicos
presentes en su entorno, como el sulfuro de hidrógeno, el amoníaco o el metano.
Quimiosíntesis vs. Fotosíntesis.
Fuente: Dreamstime.com
¡Es asombroso cómo la vida ha
encontrado formas de adaptarse en condiciones tan extremas! Allí se han
encontrado gusanos tubícolas gigantes, Riftia pachyptila, que son
realmente impresionantes. Pueden crecer varios metros de altura y poseen
cuerpos largos y blanquecinos con una pluma branquial roja que usan para
respirar, gracias a la hemoglobina de sus tejidos. Además, que se estime que
estos gusanos pueden vivir hasta 250 años solo aumenta nuestra fascinación por
ellos.
Gusano tubícola en fumarola
hidrotermal submarina. Fuente: Ingeoexpert.com
En el fondo marino, la principal
fuente de alimento es la nieve marina, que consiste en la lenta pero constante
caída de materia orgánica desde las capas superiores del océano. Esta fuente de
alimento es muy escasa, lo que hace que la vida en las grandes profundidades
sea bastante difícil.
Sin embargo, los gusanos
tubícolas gigantes no pueden crecer tanto solo utilizando sus branquias como
brazos para capturar nieve marina. Por eso, tienen una relación simbiótica con
colonias de bacterias quimiosintéticas que viven en sus tejidos. Estas bacterias
realizan la síntesis de moléculas orgánicas, ayudando a la alimentación del
gusano.
Por ello estas bacterias son la
base de la cadena alimentaria en estos ecosistemas. Gracias a ellas, otros
organismos como los gusanos pueden desarrollarse, y a su vez, permiten la
presencia de crustáceos y moluscos. Esto resulta en densidades de vida marina
que serían imposibles en otras partes de la zona abisal.
Lo más fascinante de estos
ecosistemas es cómo demuestran la interconexión de la vida en nuestro planeta.
Aunque los organismos que viven alrededor de las chimeneas hidrotermales puedan
parecer completamente independientes de la superficie y del sol, en realidad
dependen del oxígeno disuelto en el agua marina, que se origina en la atmósfera
gracias a la actividad fotosintética de plantas y microorganismos.
Es asombroso pensar que, aunque
vivan en la oscuridad total de las profundidades oceánicas, la vida de estos
organismos abisales está, en última instancia, conectada al sol. Este hecho nos
da idea de la importancia de la fotosíntesis y el papel fundamental que juega
en la cadena alimentaria, incluso en los entornos más extremos.
Estos descubrimientos han llevado
a los científicos a continuar explorando esos ecosistemas para comprender mejor
cómo la vida puede abrirse paso en condiciones tan extremas, sin luz, con altas
presiones y poco oxígeno. Aunque solo han realizado pequeños avances, cada
hallazgo nos acerca un poco más a entender el milagro de la vida en nuestro
planeta y abre las posibilidades para entender otras posibilidades de vida en
otros planetas. De hecho, una de las hipótesis que se plantean es que las
primeras formas de vida en la Tierra pudieron surgir en lugares como las
fumarolas oceánicas.
Las dorsales oceánicas: una
fuente de recursos para los humanos
Las dorsales oceánicas, donde se genera
corteza a partir del magma de las zonas más profundas, son verdaderos tesoros
geológicos. En estos lugares se han encontrado minerales valiosos como cobre,
hierro, zinc y plomo. Este potencial mineral ha despertado un gran interés
económico.
El desarrollo de la minería a
gran escala en estas zonas, aunque presenta desafíos debido a las condiciones
extremas, abre la posibilidad de aprovechar recursos naturales muy valiosos.
Sin embargo, la explotación de estos recursos plantea grandes retos éticos y
ambientales. Actuar en zonas donde apenas hemos comenzado a entender su
biodiversidad y complejidad requiere un enfoque responsable.
Caracterización química de la circulación hidrotermal en las dorsales oceánicas. Fuente: Wikipedia. Dominio público
Las dorsales oceánicas, excepto
en Islandia, se encuentran en áreas internacionales, lejos de la soberanía de
los países. La creación de la Autoridad Internacional de los Fondos Marinos
(ISA) bajo la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar de
1982 es un paso importante para regular estos lugares.
Sin embargo, al igual que en
otras zonas del planeta que no pertenecen a ninguna nación, como la Antártida,
es crucial la realización de acuerdos internacionales que racionalicen las
actividades, extractivas o no, que allí se realicen. Estos acuerdos deben
asegurarse de que no se deterioren estas zonas antes de que los científicos
puedan comprender su verdadero valor.
Conseguir
un equilibrio entre el aprovechamiento económico y la conservación de estos
ecosistemas únicos es fundamental. La minería submarina debe ser abordada con
precaución para evitar dañar irreversiblemente estas zonas tan singulares y
poco exploradas. La colaboración internacional y el respeto por la ciencia y el
medio ambiente son fundamentales para lograrlo.
La Convención de las Naciones Unidas
sobre el Derecho Internacional del Mar (UNCLOS) de 1982 establece una
distinción clara de las zonas marítimas para regular las actividades de los
estados y garantizar la protección del medio ambiente marino. Estas zonas
ayudan a organizar y regular las actividades marítimas, asegurando que se
respeten los derechos de los estados y se protejan los recursos marinos. (Somoza, 2012). Fuente: Icog.es
Referencias:
https://www.padi.com/es/sitio-buceo/islandia/silfra/
https://www.viajaporlibre.com/islandia/bucear-en-islandia-silfra-la-inmersion-mas-increible
https://www.dive.is/dive-sites/silfra
https://es.wikipedia.org/wiki/Silfra
https://arcticyeti.es/islandia/excursiones/buceo-en-silfra/
https://www.divessi.com/es/mydiveguide/divesite/147465
https://www.islandia24.com/geologia-en-islandia-formacion-de/
https://books.geoxnet.com/Tectonica/PDF/Tectonica-Islandia.pdf
https://perlan.is/es/articulos/las-placas-tectonicas-en-islandia
https://www.banaca.es/europa/islandia/info-geologia/
https://volcanismandgeology.wordpress.com/2022/06/02/islandia-y-la-dorsal-atlantica/
https://www.insugeo.org.ar/libros/misc_18/12.htm
https://es.wikipedia.org/wiki/Rift
https://ingeoexpert.com/2020/08/31/fuentes-hidrotermales-como-se-forman/
https://www.lifeder.com/quimiosintesis/
https://www2.ulpgc.es/hege/almacen/download/15/15981/figuras_Sulfuros_masivos_polimetalico.pdf
https://www.icog.es/TyT/index.php/2017/05/llega-la-era-de-la-mineria-submarina/
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