domingo, 16 de marzo de 2025

Viaje a los confines del planeta: La Dorsal Mesoatlántica

  
Texto: Mónica Alonso Ruiz

Islandia es un país isleño cerca del Círculo Polar Ártico, al norte del Océano Atlántico. Es un lugar único porque su territorio está atravesado por la Dorsal Mesoatlántica, que separa las placas tectónicas americana y europea. Así que, aunque es un país europeo, tiene una parte en América y otra en Europa.

La dorsal no es solo una línea divisoria entre dos placas de la corteza, sino un conjunto de grietas que, con el paso de millones de años, se han ido formando y desapareciendo debido al pequeño pero constante movimiento de separación de las placas.

En Islandia junto a la cueva Grjótagjá. Foto: Mónica Alonso

La dorsal en el Parque Nacional de Thingvellir. Fuente: volcanismandgeology.wordpress.com

El buceo en Silfra

Aunque suene extremo, en Islandia también se puede bucear, y no en el mar, sino en una de las grietas de la dorsal, en un lugar llamado Silfra. Bucear en las grietas sumergidas de la corteza terrestre parece sacado de una novela de Julio Verne, pero es algo al alcance de cualquiera que quiera disfrutar de una experiencia de buceo diferente.

La grieta de Silfra, ubicada en el Parque Nacional de Thingvellir, se formó en 1789 tras varios terremotos que causaron grandes movimientos entre las placas. Desde entonces, se llena constantemente con aguas provenientes del glaciar Langjökull.

Las grietas en la zona aumentan de ancho unos dos centímetros cada año, y la tensión que se acumula por este movimiento se libera periódicamente con terremotos cada diez años, más o menos. Su anchura no es uniforme, lo que da lugar a la formación de cuevas y grandes huecos que al llenarse de agua forman lagos. De hecho, Silfra se encuentra en una de las grietas más grandes de la zona, que comenzó en una cueva subterránea junto al lago Thingvallavatn.

En ese lugar puedes disfrutar de aguas cristalinas, con una temperatura entre dos y cinco grados, por lo que se usa traje seco. Además, la visibilidad llega hasta los 100 metros. ¡Una maravilla!

Aunque cuando estuve allí no buceé, he visto muchas referencias de personas que sí lo han hecho y he podido ver algunas fotos. Lo curioso de la mayoría de ellas es que muestran a los buceadores en una zona estrecha de la grieta, tocando con una mano América y con la otra Europa. Parece que la sensación de tocar dos continentes a la vez, uno con cada mano, es única en el mundo.

Bucear en Silfra permite al buceador poder tocar la placa euroasiática con una mano, y la americana con la otra. Fuente: Manawa.com

Las agencias que organizan esta actividad explican que el recorrido por la gran grieta comienza en Silfra Hall, donde se pueden ver patos y gansos nadando por encima. Luego, se ingresa a la catedral de Silfra, el punto más profundo y ancho, y finalmente se bucea en el lago.

Para participar, se requiere un nivel de “open water” y una certificación de traje seco, o haber realizado 10 buceos con traje seco certificados. Aunque no se alcanzan grandes profundidades (máximo 14 metros), se recomienda tener una certificación “advanced”. Además, en este lugar se puede obtener la titulación de especialidad PADI en buceo entre placas tectónicas, un curso que no se ofrece en ningún otro lugar del mundo.

También se realizan actividades de snorkel para los turistas que no bucean.

La Dorsal Mesoatlática emerge en Islandia

Dejando a un lado lo singular de la actividad de buceo, al viajero que va a Islandia le llama mucho la atención el encontrarse en el borde de dos placas en mitad de la isla. Esto es inusual, porque los confines de las placas suelen encontrarse en los fondos marinos y no en la superficie terrestre emergida.

Las dorsales oceánicas son como grietas submarinas. Son “rifts”, zonas donde las placas tectónicas se separan y la corteza terrestre se forma gracias a la salida de magma de capas inferiores. Por eso, son lugares donde se concentran volcanes y terremotos.

El rift es la zona central de una dorsal oceánica, donde se lleva a cabo la separación de las placas tectónicas y el surgimiento de nueva corteza oceánica. Este proceso, conocido como expansión del fondo marino, es fundamental para la renovación continua de la superficie terrestre. A medida que el magma asciende desde el manto terrestre, se enfría y solidifica, creando nueva corteza en el centro de las dorsales oceánicas. Este fenómeno ocurre a lo largo de miles de kilómetros en los océanos del mundo, y es una de las principales fuerzas impulsoras de la tectónica de placas. La expansión del fondo marino no solo forma nueva corteza, sino que también empuja las placas tectónicas en direcciones opuestas, lo que puede llevar a la formación de montañas, terremotos y otras características geológicas. Fuente: Wikipedia

 

Esquema de una dorsal oceánica. Fuente: UCLM. Dibujo: E. González Cárdenas

La Dorsal Mesoatlántica divide en dos el fondo del Océano Atlántico, separando en el Atlántico Norte las placas euroasiática y norteamericana, y en el Atlántico Sur, las placas africana y sudamericana.

Con una longitud de 40.000 km, esta dorsal suele estar sumergida entre 3.000 y 5.000 metros de profundidad. Tiene una cordillera formada por el material que sale de ella, que se eleva entre 1.000 y 3.000 metros desde el lecho marino. Sin embargo, en Islandia, siendo una isla creada por los volcanes de la dorsal, esta emerge y puede verse en mitad de la superficie de la isla. 

Las dorsales oceánicas se extienden a lo largo de miles de kilómetros por los océanos del mundo, como la Dorsal Mesoatlántica en el Océano Atlántico. Estas formaciones son fundamentales para entender la dinámica de nuestro planeta y cómo se renueva continuamente la superficie terrestre. Este proceso de creación de corteza y el flujo constante de magma resultan en características geológicas fascinantes y en la formación de paisajes submarinos únicos. Fuente: Insugeo.org

En toda la isla de Islandia se pueden encontrar grietas de la dorsal, no solo en Silfra. En ellas y sus alrededores, se pueden descubrir lugares mágicos con volcanes, fumarolas, géiseres y fuentes geotermales sacudidos por abundantes terremotos.

La cueva Grjótagjá, cerca del Lago Myvatn en el norte de Islandia, fue utilizada durante muchas décadas como piscina natural gracias a sus aguas termales. Sin embargo, actualmente el baño está prohibido debido a que la temperatura del agua ha aumentado a unos 60ºC. Esta cueva fue escenario de la famosa serie "Juego de Tronos" en 2013. Foto: Javier Larrinaga

Las dorsales oceánicas como fuente de vida en los fondos abisales

Mientras exploraba Islandia y visitaba lugares relacionados con las grietas emergidas de la dorsal, me acordé de “Planeta Azul”, donde en uno de sus asombrosos documentales se mostraban las chimeneas hidrotermales y los ecosistemas únicos que se desarrollan alrededor de ellas, que son verdaderamente sorprendentes.

En 1977, durante una expedición en el fondo del Pacífico, se descubrieron las primeras chimeneas hidrotermales en una dorsal. Estas formaciones permiten que el agua del océano, infiltrada a través de las grietas de la corteza submarina, se caliente y regrese a la superficie, generando columnas de vapor, también conocidas como fumarolas. Por ellas salen aguas termales de alta temperatura y acidez, que transportan minerales como sulfuros, que se depositan en la zona.

Las chimeneas hidrotermales son verdaderos oasis de vida en el fondo del océano, donde organismos extremófilos (que viven en condiciones extremas), como las bacterias quimiosintéticas, se han adaptado a vivir allí, utilizando los compuestos químicos presentes para su supervivencia. Estas comunidades biológicas son un ejemplo sorprendente de cómo la vida puede prosperar en los lugares más inhóspitos de nuestro planeta.

Fumarolas hidrotermales. Fuente: Ingeoexpert.com

Las fumarolas o fuentes hidrotermales pueden alcanzar temperaturas extremas de hasta 400 grados centígrados. Sin embargo, algunas criaturas como los gusanos tubícolas gigantes han desarrollado adaptaciones asombrosas para vivir en estos entornos extremos. Gracias a la simbiosis con bacterias quimiosintéticas, estos organismos pueden prosperar donde otras formas de vida no podrían sobrevivir. Fuente: BBC.com. Autor: NOAA

En los ecosistemas más conocidos por el ser humano, los organismos fotosintéticos base de la cadena alimentaria, usan la energía de la luz para sintetizar su alimento a partir de nutrientes como el nitrógeno y el fósforo. Sin embargo, en el caso de las bacterias que viven cerca de las chimeneas hidrotermales, donde no hay luz solar, utilizan la quimiosíntesis para producir energía en lugar de la fotosíntesis.

La quimiosíntesis es un proceso en el cual las bacterias obtienen energía al oxidar compuestos químicos presentes en su entorno, como el sulfuro de hidrógeno, el amoníaco o el metano.

Quimiosíntesis vs. Fotosíntesis. Fuente: Dreamstime.com

¡Es asombroso cómo la vida ha encontrado formas de adaptarse en condiciones tan extremas! Allí se han encontrado gusanos tubícolas gigantes, Riftia pachyptila, que son realmente impresionantes. Pueden crecer varios metros de altura y poseen cuerpos largos y blanquecinos con una pluma branquial roja que usan para respirar, gracias a la hemoglobina de sus tejidos. Además, que se estime que estos gusanos pueden vivir hasta 250 años solo aumenta nuestra fascinación por ellos.

Gusano tubícola en fumarola hidrotermal submarina. Fuente: Ingeoexpert.com

En el fondo marino, la principal fuente de alimento es la nieve marina, que consiste en la lenta pero constante caída de materia orgánica desde las capas superiores del océano. Esta fuente de alimento es muy escasa, lo que hace que la vida en las grandes profundidades sea bastante difícil.

Sin embargo, los gusanos tubícolas gigantes no pueden crecer tanto solo utilizando sus branquias como brazos para capturar nieve marina. Por eso, tienen una relación simbiótica con colonias de bacterias quimiosintéticas que viven en sus tejidos. Estas bacterias realizan la síntesis de moléculas orgánicas, ayudando a la alimentación del gusano.

Por ello estas bacterias son la base de la cadena alimentaria en estos ecosistemas. Gracias a ellas, otros organismos como los gusanos pueden desarrollarse, y a su vez, permiten la presencia de crustáceos y moluscos. Esto resulta en densidades de vida marina que serían imposibles en otras partes de la zona abisal.

Lo más fascinante de estos ecosistemas es cómo demuestran la interconexión de la vida en nuestro planeta. Aunque los organismos que viven alrededor de las chimeneas hidrotermales puedan parecer completamente independientes de la superficie y del sol, en realidad dependen del oxígeno disuelto en el agua marina, que se origina en la atmósfera gracias a la actividad fotosintética de plantas y microorganismos.

Es asombroso pensar que, aunque vivan en la oscuridad total de las profundidades oceánicas, la vida de estos organismos abisales está, en última instancia, conectada al sol. Este hecho nos da idea de la importancia de la fotosíntesis y el papel fundamental que juega en la cadena alimentaria, incluso en los entornos más extremos.

Estos descubrimientos han llevado a los científicos a continuar explorando esos ecosistemas para comprender mejor cómo la vida puede abrirse paso en condiciones tan extremas, sin luz, con altas presiones y poco oxígeno. Aunque solo han realizado pequeños avances, cada hallazgo nos acerca un poco más a entender el milagro de la vida en nuestro planeta y abre las posibilidades para entender otras posibilidades de vida en otros planetas. De hecho, una de las hipótesis que se plantean es que las primeras formas de vida en la Tierra pudieron surgir en lugares como las fumarolas oceánicas.

Las dorsales oceánicas: una fuente de recursos para los humanos

Las dorsales oceánicas, donde se genera corteza a partir del magma de las zonas más profundas, son verdaderos tesoros geológicos. En estos lugares se han encontrado minerales valiosos como cobre, hierro, zinc y plomo. Este potencial mineral ha despertado un gran interés económico.

El desarrollo de la minería a gran escala en estas zonas, aunque presenta desafíos debido a las condiciones extremas, abre la posibilidad de aprovechar recursos naturales muy valiosos. Sin embargo, la explotación de estos recursos plantea grandes retos éticos y ambientales. Actuar en zonas donde apenas hemos comenzado a entender su biodiversidad y complejidad requiere un enfoque responsable.

Caracterización química de la circulación hidrotermal en las dorsales oceánicas. Fuente: Wikipedia. Dominio público

Las dorsales oceánicas, excepto en Islandia, se encuentran en áreas internacionales, lejos de la soberanía de los países. La creación de la Autoridad Internacional de los Fondos Marinos (ISA) bajo la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar de 1982 es un paso importante para regular estos lugares.

Sin embargo, al igual que en otras zonas del planeta que no pertenecen a ninguna nación, como la Antártida, es crucial la realización de acuerdos internacionales que racionalicen las actividades, extractivas o no, que allí se realicen. Estos acuerdos deben asegurarse de que no se deterioren estas zonas antes de que los científicos puedan comprender su verdadero valor.

Conseguir un equilibrio entre el aprovechamiento económico y la conservación de estos ecosistemas únicos es fundamental. La minería submarina debe ser abordada con precaución para evitar dañar irreversiblemente estas zonas tan singulares y poco exploradas. La colaboración internacional y el respeto por la ciencia y el medio ambiente son fundamentales para lograrlo.

La Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho Internacional del Mar (UNCLOS) de 1982 establece una distinción clara de las zonas marítimas para regular las actividades de los estados y garantizar la protección del medio ambiente marino. Estas zonas ayudan a organizar y regular las actividades marítimas, asegurando que se respeten los derechos de los estados y se protejan los recursos marinos. (Somoza, 2012). Fuente: Icog.es

Referencias:

https://www.padi.com/es/sitio-buceo/islandia/silfra/

https://www.viajaporlibre.com/islandia/bucear-en-islandia-silfra-la-inmersion-mas-increible

https://www.dive.is/dive-sites/silfra

https://es.wikipedia.org/wiki/Silfra

https://arcticyeti.es/islandia/excursiones/buceo-en-silfra/

https://www.divessi.com/es/mydiveguide/divesite/147465

https://naturalmenteciencias.wordpress.com/2012/03/11/geologia-de-islandia-una-dorsal-oceanica-hiperactiva/

https://www.islandia24.com/geologia-en-islandia-formacion-de/

https://books.geoxnet.com/Tectonica/PDF/Tectonica-Islandia.pdf

https://perlan.is/es/articulos/las-placas-tectonicas-en-islandia

https://www.banaca.es/europa/islandia/info-geologia/

https://volcanismandgeology.wordpress.com/2022/06/02/islandia-y-la-dorsal-atlantica/

https://www.insugeo.org.ar/libros/misc_18/12.htm

https://volcanescalatrava.web.uclm.es/dorsal.htm#:~:text=DORSAL%20OCE%C3%81NICA&text=Las%20dorsales%20oce%C3%A1nicas%20se%20generan,se%20produce%20un%20intenso%20volcanismo.

https://es.wikipedia.org/wiki/Rift

https://ingeoexpert.com/2020/08/31/fuentes-hidrotermales-como-se-forman/

https://www.lifeder.com/quimiosintesis/

https://es.dreamstime.com/proceso-de-quimios%C3%ADntesis-con-energ%C3%ADa-procedente-del-diagrama-esquema-ventilaci%C3%B3n-hidrot%C3%A9rmica-fuente-partir-cadena-vida-image224321926

https://www2.ulpgc.es/hege/almacen/download/15/15981/figuras_Sulfuros_masivos_polimetalico.pdf

https://www.icog.es/TyT/index.php/2017/05/llega-la-era-de-la-mineria-submarina/

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario