lunes, 25 de mayo de 2015

LOS SIGNÁTIDOS: PECES PIPA Y CABALLITOS DE MAR

Este artículo se publicó por Mónica Alonso Ruiz en la Revista Escápate Num 14
https://issuu.com/oceanides/docs/escapate-14-2015?e=0



Hoy vamos a hablar de peces extraños y a la vez muy atractivos. Si le preguntamos a un niño de corta edad cuando ve un caballito de mar ¿es un pez?, probablemente nos diga que no, que es un caballito. Y es que estos peces tienen personalidad propia, tanta que nos apasionan y son el sueño de todo buceador: absolutamente todos nos emocionamos y nos encanta verlos en las inmersiones.
Este caballito de mar lo fotografiamos en Águilas, Murcia, en mayo de 2012, durante una limpieza de fondos. Se trata de una de las dos especies que se encuentran en el Mediterráneo: Hippocampus guttulatus.
Los signátidos son una familia de peces que incluyen los caballitos de mar, los peces pipa, y los dragones de agua. El origen griego de la palabra signátido se refiere a que tienen las mandíbulas unidas, es decir, que ese hocico alargado es, que me perdonen los biólogos, una especie de tubo a través del cual el animal succiona a sus presas. Y es que estos preciosos animalitos se alimentan de plancton y de pequeños organismos. Se mantienen inmóviles junto a sus presas, y en un instante dado se activan y van absorbiéndolos. Tragan enteras a sus presas, al no disponer de dientes, y se ven obligados a consumir grandes cantidades de comida, ya que prácticamente carecen de estómago.

Dejando un lado a los barrocos dragones marinos, de más difícil encuentro por parte de los buceadores, vamos a hablar tan solo de los caballitos de mar y de los peces pipa. La característica común, aparte de la mandíbula fusionada es que tienen un exoesqueleto formado por placas o anillos óseos, siendo los únicos peces que lo tienen. No tienen escamas y tienen la piel estirada sobre las placas óseas. Esta armadura les protege físicamente de los depredadores, aunque en realidad tienen pocos, lo cual no quiere decir que no sean muy sensibles a múltiples amenazas.
Este Hippocampus hippocampus fue fotografiado en Mazarrón, Murcia, en julio de 2012. Se aprecia en la fotografía el gran mimetismo que presenta con su entorno.
El caballito de mar destaca en el universo de los peces por su apariencia particular y su belleza. Su rostro se parece a los caballos terrestres y de ahí deriva su nombre. Los hipocampos, del griego hippo = caballo y campe = lagarto, son muy conocidos desde la antigüedad. Se creía que las cenizas de este animal servían para curar enfermedades, y en ciertas circunstancias servían como veneno. Desde tiempos remotos el hombre ha fomentado muchas historias alrededor de estas extrañas criaturas y su familia. Así las historias de enormes caballitos de mar cabalgando sobre las olas dieron lugar a las leyendas de dragones; los primeros polinesios y los indios americanos pensaron que los europeos a lomos de caballos eran dioses que dieron a los caballitos patas para poder caminar sobre la tierra. En la mitología se les asociaba con sirenas, unicornios y serpientes marinas, incluso Neptuno y otras divinidades marinas a menudo aparecen representadas dirigiendo cuadrigas de bípedos con cola de pescado.
Haciendo “muck diving” en Dumaguete, Filipinas, encontramos este precioso ejemplar macho. Véase que hay otro ejemplar en segundo plano. El animal está en una zona arenosa junto a unas rocas, a poca profundidad, junto a la playa. Probablemente sea un caballito de mar de hocico de cebra Hippocampus barbouri.
Lo más extraño de la forma los caballitos es que tienen la cabeza en ángulo recto con el cuerpo, con mucha similitud a la forma de la cabeza del caballo. Tienen el cuerpo comprimido lateralmente y una cola prensil que se puede enroscar en torno a cualquier elemento del fondo, que les permite no ser arrastrado por las corrientes. Los peces pipa, por el contrario, tienen la cabeza en prolongación de su cuerpo y la cola también es recta, presentando una aleta caudal redondeada. A estos peces les faltan las aletas caudal (la cola), aunque a los pipa no, y la ventral. Las pectorales y la dorsal son muy tenues y tienen forma de abanico. La dorsal impulsa al animal, que en el caso del caballito se mueve con el cuerpo vertical, está situada a su espalda y la agitan unas tres veces y media por segundo. Las pectorales impulsan los movimientos verticales. Son pobres nadadores: se mueven muy poco y se desplazan distancias muy pequeñas. Viven cerca del fondo o de las paredes marinas y generalmente son territoriales. Por eso cuando en una zona de buceo se descubre un caballito de mar, habitualmente se le puede volver a visitar innumerables veces en la misma temporada.
Este ejemplar hembra de Hippocampus kuda reposa en el fondo arenoso de los fondos de Dumaguete, Filipinas.
Los ojos de los caballitos y de los peces pipa también son curiosos, pues tienen movilidad independiente, lo que les ayuda a reconocer con mayor facilidad sus presas mientras permanecen inmóviles, del mismo modo al que lo hacen los camaleones, que también tienen una estrategia de caza basada en la inmovilidad. Por su gran mimetismo y capacidad de simular el color y la textura de su entorno, son difíciles de ver. Estos animales han vivido desde hace 40 millones de años y moran las aguas poco profundas y cálidas. Las zonas más propicias para verlos son los fondos arenosos o fangosos, y es frecuente encontrarlos en las zonas de fondeos con neumáticos entre rollos de cuerdas. También viven entre algas, manglares y corales.

En las costas españolas se pueden encontrar al menos dos especies de caballitos: Hippocampus hippocampus y también Hippocampus guttulatus, de mayor tamaño que el primero. En cuanto a los peces pipa, aunque no lo creamos en el Mediterráneo tenemos un representante muy desconocido para el buceador, el pez pipa mula, Sygnathus thyple, que habita en las praderas de Posidonia oceánica, y se mimetiza tanto con las hojas de esta planta, que es muy difícil reconocerlo.

El caballito de mar pigmeo, Hippocampus bargibanti, se 
mimetiza con la gorgonia en la que vive y su cuerpo 
presenta una especie de verrugas que imitan 
la textura de la gorgonia. De muy pequeño tamaño. 
En Puerto Galera, Filipinas.
Tanto los caballitos como los pipa presentan diferentes formas, colores y tamaños, y se mimetizan con el entorno, variando algunos de ellos su coloración para pasar desapercibidos. Un ejemplo muy claro es el caballito de mar pigmeo, Hippocampus bargibanti, que se encuentra en la zona del indopacífico. Este animal vive entre las ramas de las gorgonias y se mimetiza con ellas. Son muy difíciles de ver y para poder apreciarlos, generalmente hay que recurrir al guía experimentado que conoce perfectamente la gorgonia en la que viven uno o más ejemplares, y es capaz de encontrarlos y mostrarlos al asombrado buceador. Es una experiencia fascinante cuando consigues verlos, y al ser tan pequeño, es muy difícil de fotografiar para el fotógrafo amateur.

En la foto puede verse la estrategia de mimetismo de este ejemplar 
de Hippocampus histrix, el cual presenta unas manchas características 
sobre las que se adhieren invertebrados marinos y algas. 
En Puerto Galera, Filipinas. Se puede apreciar la forma característica 
de la boca de estos animales, en forma de tubo.
Como curiosidad, hay que destacar la estrategia reproductiva, en la que el macho es quien se ocupa del desarrollo de los huevos. La hembra usa su ovopositor para insertar los huevos maduros dentro de la bolsa incubadora del macho, donde son fertilizados. Esta bolsa, denominada marsupium, la cual permite diferenciar visualmente los sexos, se transforma, facilitando nutrientes a los embriones. Tanto la entrada de los huevos en el saco como su incubación ocurren en un proceso extraordinariamente rápido (apenas 6 segundos). Esta estrategia es una manera más de asegurar que los huevos proceden exclusivamente de una sola hembra, con lo que se asegura la monogamia genética para ese lote de huevos. Las especies de caballitos suelen ser monógamas, mostrando extremada fidelidad hacia su pareja.

Los embriones engordan en el marsupium y, en general, en unas tres semanas estarán preparados para afrontar por sí mismos la aventura de su vida. Pasado el plazo de incubación, el macho deja salir las crías del interior de su bolsa, a veces durante varias horas, contrayendo su cuerpo para hacer presión en forma de espasmo. Las crías son réplicas en miniatura de sus padres, y miden entre unos siete a once milímetros de largo. Son totalmente independientes y no vuelven a la bolsa después del nacimiento. El macho llega a tener cada vez entre 200 y 300 crías, dependiendo del número de apareamientos realizados con la hembra. El cortejo del macho y de la hembra es estéticamente maravilloso: los dos animales entrelazan sus colas, se colocan uno frente al otro y nadan juntos simultáneamente, en una danza nupcial.  
Este es una caballito de mar común del Indopacífico, Hippocampus taniopterus. Reposa sobre el fondo arenoso de los fondos de Puerto Galera, Filipinas.
Últimos estudios sobre la reproducción de la mula o pez pipa europeo, Syngnathus typhle, indican que el macho puede decidir sobre el éxito del desarrollo de sus crías. No siempre termina en éxito todos los “embarazos”, desapareciendo o bien todos los embriones o algunos de ellos. Además se ha comprobado que una vez que un “embarazo” ha sido llevado a cabo con éxito, el siguiente tiene menores probabilidades de éxito debido al esfuerzo realizado por el macho en el primero. Hasta el momento no se sabía qué ocurría con estos embriones desaparecidos, aunque se sospechaba de la existencia de canibalismo entre hermanos. Sin embargo las últimas investigaciones han aclarado este misterio. En la naturaleza el número de machos es superior al de las hembras, siendo éstas por lo tanto las que eligen pareja en el momento de la reproducción. Sin embargo el macho puede abortar los embriones de las hembras que consideran menos atractivas, generalmente de menor tamaño, economizando los recursos para futuras oportunidades reproductivas con hembras más atractivas, de mayor tamaño.
El pipa mula, Sygnathus typhle . Licencia CC. Roberto Pillon

Primer plano de un pipa mula, Sygnathus typhledonde se puede apreciar la característica forma de su boca, 
común para todos los signátidos. Licencia CC. Gilles San Martin
Estos peces pipa fantasma robustos (Solenostomus cyanopterus
se camuflan con el entorno pareciéndose a hojas. Dumaguete. Filipinas
Los peces pipa pueden tener formas muy curiosas en las zonas tropicales, como es el caso de los peces pipa fantasma, que suelen verse en parejas, muy camuflados. Son muy frágiles, y debemos resistir la tentación de tocarlos. De los pipas, los fantasma son más convencionales en cuanto al cuidado de los huevos, puesto que lo realizan las hembras. Hay pocos estudios al respecto y se ha sugerido que todos los peces pipa fantasma nacen machos, y algunos de ellos pasan a ser hembras, de mayor tamaño.

Un pez pipa fantasma ornado (Solenostomus paradoxus) camuflado entre látigos de coral. 
Dumaguete. Filipinas
Hembra de pipa fantasma ornado. Dumaguete. Filipinas
Existen algunos depredadores naturales para los caballitos de mar y peces pipa, siempre dependiendo de la ubicación. Este grupo incluye a la raya, los pingüinos y los cangrejos. Sin embargo, el clima es un gran problema para ellos y mata más adultos que cualquier depredador. A menudo mueren por agotamiento cuando tratan de moverse durante largos períodos de tiempo en aguas turbulentas, pues por lo general los caballitos de mar viven en áreas de movimientos suaves, pero en ocasiones las condiciones del clima pueden alterar el estado de las aguas rápidamente. Por otra parte, la extensión de grandes redes de pesca de arrastre en las zonas donde vive el caballito de mar (poca profundidad) es actualmente la causa por la que anualmente mueren miles de ellos.

Este colorido caballito es un macho, posiblemente 
preñado, se denomina caballito de mar espinoso 
Hippocampus histrix. En Puerto Galera, Filipinas.
Actualmente sus especies, especialmente las de los caballitos de mar, están incluidas en las listas en peligro de extinción y su comercio se halla regulado por Cites. Es muy triste para el buceador comprometido con el medio marino saber que se capturan toneladas de caballitos de mar para obtener polvos, de cualidades discutibles, para la medicina asiática. Alrededor de 20 millones de caballitos de mar al año se utilizan para este fin. Hay un gran comercio de caballitos, y se estima que mil millones de ejemplares se venden cada año, en muchos casos para la acuariofilia y como recuerdo. Se cree que menos de 1000 ejemplares de los capturados llegan a vivir más de seis semanas. Se adaptan mal a los acuarios, y mueren de estrés y enfermedades. 

miércoles, 13 de mayo de 2015

CURSO DE BIOLOGIA Y CLÍNCA DE ELASMOBRANQUIOS DEL CRAM. PARTE I

Texto: Mónica Alonso Ruiz

Introducción.

Hace muchos años que conozco, al menos de oídas, de la actividad del CRAM, especialmente en lo referido al rescate de tortugas y cetáceos varados. Posiblemente la primera vez que supe de ellos fue cuando preparaba en ZOEA, un documento sobre tortugas marinas, hace ya más de diez años.

Precisamente ahora, ha sido a través de ZOEA, como me he enterado de este curso, que tuvo lugar en las instalaciones del CRAM en El Prat de Llobregat, en Barcelona, los pasados 28 y 29 de marzo.

Al curso asistí bien acompañada por Grace López, socia y voluntaria de la Alianza Tiburones Canarias, la asociación para la cual dedico casi todos mis esfuerzos en la defensa de los tiburones.

Así que allí estábamos, Grace y yo, llegando por la Carretera de la Playa, a las instalaciones del CRAM. Tras esperar unos minutos en la puerta de entrada al recinto, finalmente alguien abre al verja y entramos.

Caminamos unos metros y encontramos dos edificios, y delante de uno de ellos una figura de un tiburón: buenas sensaciones. Tras unos minutos nos avisan desde un edificio cercano que podemos pasar, es la zona de aulas del CRAM.


Aunque la cara visible y la persona que condujo el curso fue Tania Monreal, en el mismo participaron en la organización las siguientes personas:

  • Gemma, sin la cual no hubiera habido curso
  • Josep, el que lo sabe todo de la clínica
  • Elsa y Oriol, que organizaron todo lo relativo a ordenadores, comidas, diplomas y logística
  • y por supuesto el Sr. José Luis Pal, presidente del Cram

Tania Monreal nos da la bienvenida en nombre del CRAM y nos explica en qué va a consistir esta primera edición del curso, y comenzamos. La sala de conferencias está bastante llena: somos una veintena de alumnos: un éxito de asistencia.

A continuación voy a comentar algunos de los principales conceptos que se manejaron en las diferentes charlas y actividades, al menos los que más me llamaron la atención, algunos por ser nuevos para mí, o porque aunque ya conocidos, fueron comentados en un contexto novedoso. No se trata de hacer un resumen de cada charla, sino de destacar aquellos aspectos curiosos o novedosos.

Los ponentes fueron los siguientes:

  • Patrici Bultó, conservador del L'Aquàrium de Barcelona, que nos habló de la taxonomía de los tiburones y rayas y aspectos generales
  • Claudio Barria, Investigador especialista en Tiburones y Rayas del Instituto de Ciencies del Mar (CSIC) en Investigador Asociado al Grupo de Estudio de Elasmobranquios, Elasmolab (Chile), que nos habló sobre la anatomía y fisiología de los tiburones, de la ecología y distribución, y de tiburones en peligro.
  • Mónica Valls. Veterinaria de L'Oceanogràfic de Valencia. Área de Biología. Parques Reunidos Valencia. Ciudad de las Artes y las Ciencias, que nos habló de la clínica y manejo de elasmobranquios.
  • Tania Monreal-Pawlowsky, Área de Clínica y Rescate de la Fundación Cram, que nos habló de algunos casos clínicos de elasmobranquios y nos dio el taller de disección de tiburones.
Comenzamos en este primer post por la primera charla, que abarcaba una gran parte de conceptos generales de los elasmobranquios, casi todos muy conocidos para mí, pero hubo muchas curiosidades que me sorprendieron.
Tania y Patrici antes de comenzar el curso

Taxonomía y biología de los elasmobranquios.

Por: Patrici Bultó, Conservador de L’Aquàrium de Barcelona.

La primera charla la lleva a cabo Patrici Bultó, del Acuario de Barcelona, y comienza por lo más básico, explicar lo que es un elasmobranquio (branquias al aire, tiburones y rayas), los condrictios (los peces de esqueleto cartilaginoso, que incluyen, además de los tiburones y rayas, también a las quimeras, las cuales no pueden incluirse dentro de los elasmobranquios pues tienen sus branquias cubiertas con un opérculo, como el resto de los peces.

Los elasmobranquios  aparecieron en nuestro planeta hace más de 400 millones de años, siendo que la especie humana lleva aquí desde hace 200 mil años. Son campeones de la evolución, ya que sobrevivieron a los dinosaurios, que vivieron en el periodo desde hace 240 millones de años hasta su extinción, hace 60 millones de años.


Patrici nos habló de algunos tiburones extintos, como el Megalodón, tan conocido por los documentales de televisión. Nos contó que siempre se había pensado que  fue un antecesor del tiburón blanco, y que, tras encontrarse dientes de megalodon y de tiburón blanco en un mismo estrato, se ha considerado que si hubo coexistencia de ambas especies, pues no es posible que uno fuera el antecesor del otro. Por ello se ha cambiado el género de su nombre científico, que ha pasado de ser Carcharodon a Carcarocles megalodon. Anatómicamente muy parecido al tiburón blanco, estimación realizada tras el análisis de su mandíbula, y se cree que alcanzaba hasta 18 m de longitud.


Helicoprion, un tiburón extinto


Los tiburones primitivos presentan algunas características diferenciadoras de los tiburones actuales, tienen dientes con muchas cúspides (y nos enseña algunos dientes de tiburón toro, del acuario, el cual en sus dientes presenta tres cúspides, pero no es lo normal en los tiburones modernos), también tienen la boca frontal y aletas con radios (ahora son rígidas, de cartílago).



Luego nos explica brevemente la taxonomía de tiburones y rayas actuales, y los diferentes órdenes en los que están incluidos ambos grupos.

Entre muchas explicaciones anatómicas de los tiburones Patrici nos habla de la válvula espiral, situada al final del intestino, y que la poseen muchas especies de tiburones, entre ellos los carcariniformes, y que sirve apara aumentar la eficacia de la obtención de nutrientes del alimento ingerido, de manera que puede decirse que los tiburones digieren casi todo lo que comen, por lo cual puede decirse que son muy eficaces aprovechando casi todo el alimento. Esta válvula, ya conocida para mí anteriormente a este curso, tendrá mucho protagonismo a lo largo del mismo.


Nos cuenta infinidad de curiosidades, como por ejemplo que las cañabotas tienen muchas crías, o que los cerdos marinos, de los cuales hay dos ejemplares en el acuario, se alimentan de huevos de otros tiburones. 

http://blogueiros.axena.org/2011/03/31/los-cerdos-marinos/

Otras curiosidades: el tiburón sarda (Carcharhinus leucas) es capaz de remontar ríos, y se les ha visto en el Lago Nicaragua, en la parte baja del Amazonas, y en el Zambeze.

Otra cosa curiosa, de la que ya había oído algo, es que los tiburones comen poco, menos del 1% en peso diario, y que lo hacen de manera muy irregular, pudiendo el longimanus (pelágico) pasarse hasta 6 meses sin comer.

El Mediterráneo es un lugar importante para los tiburones, donde puede haber más de 45 especies registradas. Y nos habla de que nuestro mar es también conocido porque el nivel de declive de las poblaciones de tiburones es superior al de otros mares. La población de la tintorera (Prionace glauca) ha bajado en un 90 % en el Mediterráneo en las últimas décadas. Explica que posiblemente si el Mediterráneno no estuviera conectado con otros mares por el Canal de Suez o con el Atlantico por el Estrecho de Gibraltar, muy probablemente podríamos estar hablando de que esta especie está extinta en nuestro mar.

Patrici nos habla de que el Mediterráneo se cree que es una zona de cría y apareamiento de tiburón blanco en Sicilia, Malta y Túnez, y que esto se cree por la aparición de hembras con mordiscos, consecuencia del violento apareamiento.

En cuanto a características fisiológicas se habla del mito del tiburón que muere si no deja de nadar. Y explica que los tiburones tienen dos formas de respirar, y que ambas no están presentes en todas las especies: se trata de la respiración pasiva, la de entrada de agua por la boca al nadar, y salida por las hendiduras branquiales, y la respiración activa, que tienen también los tiburones y rayas, mediante el espiráculo situado tras los ojos, por donde el tiburón succiona agua, la cual sale por sus branquias. La respiración activa la tienen, como complemento a la activa, los tiburones de fondo y las rayas, y es precisamente una adaptación a la vida bentónica. Por ello, no se puede decir que todos los tiburones mueren si dejan de nadar, los bentónicos con espiráculos no.

La natación de los tiburones es también característica, se realiza a golpe de cola y por deslizamiento de su cuerpo fusiforme, ayudado por el hidrodinamismo de su piel, cubierta de dentículos dérmicos, que reducen el rozamiento del cuerpo en el agua. Por ello la cola en los tiburones rápidos es muy potente y homocerca (los dos lóbulos de igual tamaño) en los pelágicos, y heterocerca en los bentónicos, los cuales tienen el lóbulo inferior menos desarrollado.


Comenta que los lámnidos, los tiburones más veloces, tienen un metabolismo elevado y pueden subir la temperatura de su cuerpo por encima de la del medio que les rodea, y así ser muy eficaces en su natación.
Nos da unas breves nociones de la reproducción de los elasmobranquios, y nos explica que los tiburones tienen en general dos úteros.

Volviendo al tema de la cantidad de alimento de los tiburones nos enseña una tabla del % de alimento diario de diferentes grupos de animales marinos:

% de alimento diario en animales marinos
Tiburones
Mamíferos marinos
Pingüinos
0.5 - 2 %
5 %
7  - 14 %

Los humanos consumimos un 4 % entre alimento y agua diario.

Ante mi pregunta de si los lámnidos, por su capacidad de aumentar su metabolismo, requieren de una mayor cantidad de alimento, Patrici responde que son precisamente los lámnidos los que tienen una tasa más alta de alimentación.

Finalmente se da un repaso a las amenazas a las que están sometidos los tiburones, y nos habla en primer lugar de los ataques, que son realmente escasos, y nos explica el caso de Rodney Fox, una víctima de tiburón que ha dedicado su vida a defenderlos.



Sobre el aprovechamiento del tiburón, me llama la atención cuando explica que parece que están investigando los ojos del tiburón y su posible aprovechamiento de alguna forma, en trasplantes de córnea. Y de la sangre del tiburón se han obtenido anticoagulantes....









Fotos extraídas de la Presentación de Patrici Bultó en el Curso

Finalmente en la rueda de preguntas sale el tema de los tiburones en acuarios (aquí la polémica está servida) y nos cuenta que el Acuario de Monterrey aprovecha las capturas de tiburones blancos de sus costas, y que luego los devuelven el mar. Sin duda esta práctica, de la cual yo no había oído hablar, va a ser objeto de análisis por mi parte, para poder tener una opinión sobre la misma.

Para acabar la charla nos puso el vídeo de Cristina Zenato, en el que se pone en inmovilidad tónica al animal y así poder manipularlo y demostrar que el mito del tiburón comehombres no es verdad.

https://www.youtube.com/watch?v=WK2LpUoqX6A

Próximos posts del curso.

No os perdáis los próximos posts con cosas curiosas sobre el curso, que iremos publicando.